lunes, 8 de abril de 2013

TENACIDAD ANTE LAS CIRCUNSTANCIAS

Alguna vez pensé que no estaba bien el ser insistente, aferrado, obstinado, "cabezón" o no dejarme convencer por nada ni nadie sobre aquella bendición que ya se me había dado y que supuestamente no era para mí; pero, cuando leía en Mt. 20:30-34 en donde dos ciegos clamaban: "¡Jesús ten misericordia de nosotros...!... ¡Jesús ten misericordia de nosotros...!... ¡Jesús ten misericordia de nosotros...!" y gritaban y gritaban cada vez más fuerte para que Jesús los pueda oír  y, a pesar que la gente les pedía que se callasen para poder escuchar lo que el Maestro les quería decir, ellos siguieron y siguieron, ellos buscaban que nuestro amado Jesús tenga misericordia de ellos y cuando al fin consiguieron su atención, pues no dudaron en pedir su milagro consiguiendo lograr lo que tanto habían esperado y lo siguieron... Esto es maravilloso, simplemente FANTÁSTICO!!!

Ahora, ya más fortalecido, pues no dejaré de clamar a Dios, de pedirle... "Clama a mí y yo te responderé" (Jeremías 33:3), no me detendré ante nada y seguiré hasta que todas las bendiciones que tiene Dios preparadas para mí me alcancen y yo pueda gozar de todas ellas.

Señor, te pido que me sigas fortaleciendo día a día, así como hoy que estuviste conmigo, me enviaste ese abrazo que tanto necesité y que llenó mi alma, solo a ti te debo todo, me das todo tu amor solo me queda darte gracias... Gracias mi amado Padre, gracias por todo ello, gracias por la mayor de las bendiciones que me has enviado, muchas gracias... Amén
TENGO FE